martes, 8 de noviembre de 2011

reflexion


Estando pendiente de una discusión ajena (chismoso o metiche me podrían decir) vi como un argumento de alguno de los involucrados se fundaba en la opinión de un individuo de gran renombre, lo cual me causó mucha gracia, es fascinante observar como aquellos que se las tiran de inteligentes, intelectuales o sabiondos tienen que usar a menudo ese recurso para salirse con la suya. Si bien es cierto que Dios o la naturaleza no nos dotó a todos (incluido este servidor) con la facultad de argumentar ampliamente, si nos dio la facultad de ser fieles a nuestros pensamientos y convicciones, ahora bien, ¿es acaso el personaje de alta facultad argumentativa más inteligente, sabio o profundo que aquel que no la posee? Yo supongo que no, solo lo hace más hábil y eventualmente más conocido que a quienes no poseen esta facilidad, pero no por ello es necesariamente lo correcto.  Invito nuevamente a mis pocos pero fieles lectores a reflexionar  sobre este tema. Tal vez sería más productivo si cada ser humano se dedicase a crear sus propias convicciones y defenderlas sin involucrar en ellas palabras ajenas, sino creyendo profundamente en ellas. No creo en la existencia de grandes pensadores, creo en la existencia de mediocres sin iniciativa, es bueno leer, y aprender es excelente, pero en la medida en que ello forme la convicción y el carácter propio, podrá sonar narcisista, incluso egocéntrico, pero no lo es, es una invitación a todos a ser más entregados a sus propias empresas intelectuales, a someter a examen propio sus convicciones, además en un país en vías de desarrollo como el nuestro, el empuje de ideas nuevas y nacidas de cada uno de los integrantes de esta nación, es la clave para su escalada, de nada sirve pensar de aquello que se dice en Dinamarca cuando allá no conocen los problemas de Cundinamarca.
Espero que los amables lectores hayan entendido mi posición y les haya quedado clara, sino deje su comentario y tratare de despejar las dudas. Un abrazo para todos

6 comentarios:

  1. Buenas noches Simón. No, no entiendo su posición y de verdad si me gustaría que me aclarara varios puntos. Primero: ¿Ha estudiado usted toda su vida en la universidad de la vida? Mire le cuento: mi primera como "referencia bibliográfica" para desenvolverme en el mundo fueron mi mamá y mi papá, cuando yo estaba muy pequeño ellos me decían que no era como muy agradable que yo me andara por ahí haciéndome en los pantalones, así que me enseñaron a usar el baño, hoy en día, y afortunadamente, cada vez que tengo una necesidad fisiológica me dirijo a ese mágico lugar privado porque me REFIERO a lo que alguna vez me dijeron mis padres y lo uso como argumento dentro de mi devenir social, gracias a ésa referencia ahora no estoy internado en el San Juan de Dios. A medida que fui creciendo me fueron enseñando cositas en el colegio al cual asistía porque si bien yo estaba absolutamente CONVENCIDO de que las estrellas eran meros punticos en el cielo (ahí como por ponernos un tanto poéticos), mi profesor, REFERENCIADO en unas foticos que ha tomado una organización espacial estadounidense que creo que se llama NASA (no se, yo soy un poco ignorante y me gusta dudar de lo que estoy convencido con el fin de poder reevaluar día a día mi conocimiento y mis convicciones), me dijo que las estrellas eran bolas gigantescas de fuego y a mí, en lo personal, (pues, no se usted qué pueda pensar al respecto, aunque lo infiero por otra entrada en éste mismo blog), me pareció un conocimiento mágico y maravilloso, me fascina la ciencia, por cierto, llena de daticos sorprendentes y me fascinan los cuentos de hadas, llenos de historias entretenidas. Bueno, me le voy a saltar la parte del bachillerato porque es un toque aburrida y me voy directo a la universidad, que es donde ahora estoy. Resulta que estudio medicina y resulta que en varias referencias bibliográficas (por no decir que en demasiadas) se habla de que el medicamento para la presión del abuelito, que se llama Enalapril, tiene como principal efecto maluco una tosecita persistente que no se quita con nada. Yo, la verdad, espero que mi abuelito, que toma el medicamento y tiene control dentro de un mes por lo de la presión, no se encuentre con un médico que este convencido de que su tos no es por el Enalapril.

    Bueno, segunda cuestión: ¿Ha oído usted alguna vez en su vida hablar de algo en filosofía que se llama epistemología? Una rama bastante interesante de la filosofía, muchos de los pensadores de los que se habla en epistemología, ¿Sabe por qué se le llamaban pensadores?, porque se dedicaban a éso, quizás hayan gastado gran parte de sus cortas vidas pensando intensamente sobre alguna cuestión de ésas que tanto les interesa a los mechudos esos de la de Caldas. ¿Será que si ésos pensadores de verdad pensaron tanto, lo que nos tengan para decir respecto a un tema será desdeñable?, alguito de razón deberán de tener en cosas en las que el resto de la humanidad que andamos por ahí haciendo nada, no sabe como qué opinar.

    Mire don Simón, todo éste rodeo para comentarle que me parecen absolutamente indignantes dos cosas respecto a su entrada: su desdén absoluto del conocimiento que otros nos puedan aportar (sea Kant o sea mi mamá, ambos son referentes para mí en distintos contextos) y su fe absurda en su fe. A mí, la verdad (y como usted la pinta acá), convicción me suena a creencia y las creencias son bonitas y todo pero son un poco resistentes a la crítica. Yo, en lo personal, prefiero conservar una pizca de humildad y salir a hablar con mis amigos, no se, tomándonos un tinto en Juan Valdés o algo y que ellos, gracias a sus referencias (gente que ha pensado intensamente respecto a un tema), me digan "Hey, parcerito, mirá que tal cosa no es así como la pensás porque tales y tales... etc." y yo salir con esa sensación de que aprendí un poquito más, a mi me gusta, no se a usted don Simón.

    ResponderEliminar
  2. Bueno, ya, ésas eran las dudas, espero que me las conteste porque su blog pinta como un buen blog de opinión y me gustaría seguir volviendo por aquí como a mirar a ver que ha pasado y en que puedo ahí como medio ayudar por los laditos con mi humilde opinión, por ahora me voy a dormir porque está como tarde.

    Un saludo pues don Simón y, el abrazo, ése si no se lo recibo porque mi mamá me enseñó que uno no se deja abrazar de extraños. Todo bien.

    P.D.: Hoy le escribí todo ésto con toda convicción pero le cuento que lo más probable es que me levante mañana, lea de nuevo mi comentario y diga "¡Oh, cantidad de basura la que escribí anoche!" y me divierta con el replanteamiento de mis ideas. A mí me divierte pensar, ¿Y a usted?

    ResponderEliminar
  3. (Ahí me disculpará la repetición de comentarios pero es que Blogger ordena los comentarios como le da la gana entonces le toca a uno hacer una cantidad de maromas para que los comentarios largo y que a uno le toca partirlos, queden en el orden que uno quiere... usted entenderá).

    ResponderEliminar
  4. apreciado sebastian, tal vez entendio usted en su afan de mal modo las palabras en mi blog, a lo que en el me referia no era a la ausencia de estudio de los pensadores, la epistemologia la conozco bien pues soy estudiante de derecho, tal vez como se habra dado cuenta soy muy viceral con mis escritos, y asi soy con todo, agradezco mucho el tiempo que se tomó para leer y comentar mi blog, que espero no sea solo de opinion y que personas de su inteligencia lo sigan leyendo, ahora si a los hechos.

    a lo que me referia al escribir dicho articulo, no era al desden del conocimiento que han adquirido y aportado otros a la humanidad, dichas cuestiones son de mucho valor para todos, lo que queria decir con ello, es que a medida que vamos avanzando seamos nosotros quienes adoptemos dichas enselñanzas, usemos aquellas que consideramos realmente validas y las nutramos con conceptos de creacion propia, es posible que me haya pasado de prepotente en mis palabras, lo cual no quiere decir que yo lo sea permanentemente, lo que estaba haciendo era una invitacion a argumentar con convicciones y teorias de nuestra propia cosecha, aportar lo nuestro a lo que los GRANDES han dicho y hecho y no quedarnos plantados y convencidos de verdades solo porque un sujeto de renombre alguna vez las dijo, obviamente cada quien es libre de creer, sentir y convencerse de lo que se le antoje, pero es la capacidad de soñar y ver todo desde diferentes perspectivas, retrogradas, modernas y progresistas, lo que hace evolucionar el mundo... espero le haya quedado clara la explicación, pues a veces soy muy difuso en mi argumentacion... si alguna inquietud queda sigo gustoso de poder debatirla
    reciba un abrazo

    ResponderEliminar
  5. Aunque es paradójico, quisiera resaltar el viaje que hace el Siddharta, que sin buscar doctrinas encontró su propio principio a partir no de la intelectualidad, sino de su propia mística viviente en el río de su interior.

    también creo que es importante conocer el antecedente para compilar en nuestra alma lo decodificado y codificado de almas predecesoras.

    ResponderEliminar
  6. e marulini, en tu comentario de dificil comprension recogiste en gran parte lo que yo queria expresar

    ResponderEliminar